¿Conoces el dicho que nos invita a tener un hijo, escribir un libro y plantar un árbol? En este ejercicio no haremos nada de eso literalmente, pero si tomaremos consciencia del Árbol de nuestra vida. Todos hemos plantado un árbol, quizás no orgánico, pero si simbólico, experiencial y emotivo. Ese árbol, es el árbol de tu vida.
Somos lo que decidimos hacer con aquello que no elegimos tener. Nuestra historia, nuestra niñez y adolescencia, nuestros triunfos y fracasos, los vínculos sanos o insanos que establecieron las personas significativas de nuestras vidas, esa palabra fugaz pero memorable que te dijo esa persona que ni siquiera recuerdas su nombre, los dolores de la vida, las alegrías y regalos de tu existencia, todo eso, lo que recuerdas y lo que no, ha conformado tu autoestima, tu autoconcepto y te ha llevado a ser quien eres hoy.
El HOY DE TU VIDA es un presente, un regalo maravilloso, pues cada momento es una OPORTUNIDAD para decidir cómo ser, qué hacer y tomar las riendas de tu vida que te conduzcan a las metas que te propones. Por eso decimos que "somos lo que decidimos hacer con aquello que no elegimos tener" ¿Cuánto de tu historia elegiste tener? pero, ¿Cuánto de tu presente tienes el poder de elegir?
Te invito a realizar este ejercicio. Muy utilizado en procesos de coaching y en psicoterapia. Se trata, del ÁRBOL DE TU VIDA. Si gustas puedes escribir comentarios de cómo te sentiste y qué descubriste de ti mismo al hacer este ejercicio.
Compártelo en los comentarios de este post para que alientes a los demás a conectarse con ellos mismos y trabajar en su autoestima y autoconcepto. ¡Que lo disfrutes!
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